
Quiero que me digas te quiero, pero de los de verdad, que no haya nadie más en tu memoria, que cuando te vallas a dormir lo único que pienses sea en ti, en mi, en nosotros. Que todas las mañanas cuando te levantes, lo primero que hagas sea llamarme para darme los buenos días.
Pero esque me he dado cuenta de todo esto tarde, cuando te tenía te deje ir, te deje escapar. Todo el mundo se equivoca alguna vez, ¿no crees? Sí, sin ir a más, tú te as equivocado muchas veces, pero te he perdonado y ahora cuando más te quiero, cuando cada segundo que paso a tu lado parece que se me va a salir el corazón del pecho; dices que todo esto no nos lleva a ningún lado. Claro mi puesto ya lo ocupa otra, tu corazón lo ocupa otra, ya no soy yo la razón por la que sonríes.
No me puedo imaginar atí diciéndole, “te quiero”, “cariño”; esque no me lo puedo imaginar... Sí, me pongo celosa, me enfado conmigo misma por dejar escapar mis sueños.
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